Perspectivas Insólitas en Cómic
Los puntos de vista insólitos, como las violentas angulaciones en picado o en contrapicado, permiten ofrecer a veces representaciones distorsionadas del espacio óptico y perspectivas violentamente exageradas, como las que permiten los objetivos de gran angular en fotografía y cine. Esta técnica de representación fue descubierta por algunos pintores del Renacimiento y si Leonardo Da Vinci experimentó con las perspectivas curvilíneas (que se formalizarían en la pintura anamórfica y conducirían al actual objetivo ojo de pez), Mantegna pintó por su parte en 1480 un Cristo muerto tumbado, en un acentuado escorzo, que suscitaría numerosos comentarios por su atrevimiento plástico. Los comics, nacidos en la era de la ubicuidad obtenida por la aviación, no dependieron como la fotografía o el cine de un engorroso utillaje reproductor, que obligaría a sus operadores a difíciles acrobacias para conseguir sus perspectivas insólitas. El dibujante podía obtener los más audaces puntos de vista recurriendo únicamente a su imaginación. Ni la fotografía ni el cine llegarían tan lejos, a pesar de los citados objetivos de gran angular, que enfatizan las perspectivas e inclinan las líneas verticales.

Perspectiva obtenida desde un punto de vista aéreo, en riguroso picado, en una viñeta de 29 Dollars & Bones (1980), de Silvio Cadelo.

Este enfático picado de Guido Crepax en Justine (1979) está caracterizado por el descentrarniento del punto de vista, descompensado hacia la izquierda.

En esta acentuada perspectiva de A través del espejo, de Beroy, puede observarse bien la anómala inclinación de las paredes verticales.

La ausencia de techo permite obtener esta vistosa perspectiva en la viñeta de Spirit de Will Eisner.

También en esta imagen de Red Barry (1964), de Will Gould, la ausencia de techos y el recorte de una pared, en una fórmula de aire teatral o propia del primitivo cine mudo, permite obtener una extensa perspectiva que abarca la acción en dos habitaciones contiguas, para ilustrar las posiciones del ejecutor y de su víctima.

Otra sección arquitectónica, en Spirit, de Will Eisner, que permite hacer visible la acción que tiene lugar en las dependencias contiguas.

Perspectiva urbana en violenta angulación picada, que hace bascular las líneas verticales, en El niñato, de Gallardo y Mediavilla.

El contrapicado propuesto por George Tuska en esta imagen de The House That Hale Built (1970) constituye, por su exageración, un verdadero punto de vista de gusano.

Tres puntos de vista aéreos ofrecidos por Ricardo Barreiro y Juan Giménez en Ciudad, desde alturas crecientes a lo largo de tres viñetas, como si el paisaje urbano fuese visto por un observador que se aleja.

Una perspectiva insólita, cuya rareza viene incrementada por el carácter futurista del escenario, perteneciente a Tales From Somnopolis, de Beto Hernández.

Un mundo en que los suelos y los techos fuesen de vidrio permitiría obtener perspectivas tan indiscretas como la ofrecida por François Schutten en La desbandada.

La pronunciada perspectiva obtenida por esta angulación en picado en Spirit, de Will Eisner, aparece reforzada por la mirada del personaje de la derecha al techo.

El efecto que en fotografia y en cine se obtiene con el objetivo gran angular, que distorsiona las perspectivas, ha influido en algunos dibujantes de comics, como en esta viñeta de Li’l Abner, de Al capp.

Efecto óptico de zambullida en la bañera, vista desde lo alto, obtenido por Guido Crepax en una original viñeta de Bianca (1971).