Cómo dibujar el esqueleto humano
El esqueleto está constituido por huesos, estructuras vivas que reciben el aporte de los vasos sanguíneos y los nervios. Pueden debilitarse y perder consistencia con la falta de uso, o volverse más compactos y fuertes cuando aumenta el peso que soportan durante un cierto período de tiempo. También se alteran a causa de enfermedades pasajeras y por desnutrición.
En el embrión, son como esbozos membranosos o cartilaginosos de lo que serán después; esto es, elementos blandos y flexibles, en los que gradualmente, a medida que avanza el crecimiento, van depositándose sales y un medio de unión denominado sustancia adherente. Este proceso de osificación termina en el hueso duro que conocemos, y de ordinario no se completa hasta los veinticinco años. El esqueleto es la armazón de nuestro cuerpo, y los huesos que lo componen han de desempeñar unas funciones específicas. Los huesos largos de los brazos y las piernas actúan como palancas de los músculos y hacen posibles los movimientos que requieren fuerza o suavidad. Los huesos planos que forman la bóveda del cráneo protegen al cerebro. La caja costal resguarda el corazón, los pulmones y el hígado. La cavidad pelviana, formada por los huesos planos de la pelvis, no sólo cobija las vísceras abdominales en cierta medida, sino que soporta su peso. Los huesos de la muñeca y del arco del pie son muchos y pequeños, y están unidos fuertemente por estructuras fibrosas llamadas ligamentos, de forma que las fuerzas descargadas en las manos y pies pueden repartirse por esta pequeña red flexible sin que se produzca una fractura. En las zonas en que los músculos y tendones se insertan en el hueso, de forma que puedan realizarse movimientos, se desarrollan excrecencias óseas denominadas tubérculos, tuberosidades y apófisis. Aunque el número normal de huesos en el ser humano es de doscientos seis, algunos de estos se unen con la edad, y es posible también que desde el nacimiento se tenga algún hueso más o menos. Pero los. principales componentes del esqueleto son los mismos. Todos tenemos un cráneo, una caja torácica y una pelvis, aunque la configuración respectiva puede variar mucho de una persona a otra: la caja torácica puede ser larga y estrecha, corta y ancha, redondeada o aplanada, y. presentar cualquier combinación de estas características. El esqueleto contribuye a la constitución de la persona, dejando aparte los músculos y el tejido adiposo. Con la información que aporto sobre el esqueleto, así como de todas las partes del cuerpo, no pretendo imponer reglas, sino ampliar el conocimiento de las formas y sus movimientos posibles. No debes olvidar que tu propio cuerpo puede servirle de guía para la observación, el examen detallado y el dibujo del movimiento. Espero que los puntos de referencia del esqueleto que facilitaré en esta guía de dibujo de anatomía te permitan respetar las proporciones no sólo con más seguridad, sino también con más afinidad.
Diana garcia | Sep 30, 2020 at 7:19 pm
Quiero aprender a dibujar el esqueleto humano con sus partes